Gestión de proyectos BIM – Mejores prácticas

Aunque la popularidad del modelado de información para la construcción (BIM) se ha disparado en los últimos años, aún no se utiliza tan comúnmente como medio para mejorar diversos esfuerzos relacionados con la gestión de proyectos. Dado que uno de los principales objetivos del BIM es cambiar y mejorar la comunicación de la información, su importancia para el departamento de gestión de proyectos ya debería ser bastante obvia.

BIM: una visión general

Decir que el BIM no es más que un programa informático es quedarse corto. El principal motor del reciente éxito del BIM son los procesos que puede crear entre los distintos participantes del proyecto.

El principal objetivo del BIM es mejorar la comunicación, especialmente entre dos de las partes principales de cualquier proyecto relacionado con la construcción: el equipo de diseño y el equipo de construcción.

El BIM es una tecnología relativamente nueva y no existen demasiadas normas en torno a ella. Por ejemplo, aquí están los «Niveles de BIM» del Reino Unido que se introdujeron junto con el requisito obligatorio de que cualquier proyecto de construcción financiado con fondos públicos utilizara el Nivel 2 de BIM, como mínimo. He aquí lo que implican esos «Niveles de BIM»:

• Nivel 0. El programa CAD (diseño asistido por ordenador) más básico que existe, sin apenas nada más.
• Nivel 1. Se introduce el «CAD orientado a objetos»: capacidades de modelado 3D en los datos CAD.
• Nivel 2. Implementa un conjunto de requisitos tanto para compartir como para formatear. Incluye formatos de archivo comunes para programas CAD (COBie o IFC) y CDE (entorno común de datos) para compartir mejor los datos.
• Nivel 3. Sigue sin estar claro, pero se centra en la creación de una lista de normas para simplificar aún más el intercambio de datos. A menudo se refiere a programas de diseño basados en bases de datos con múltiples posibilidades de colaboración.

El nivel 3 es el que a menudo se presenta como ejemplo cuando se habla de los beneficios del BIM en su conjunto, aunque todavía hay mucha gente que ni siquiera se acerca a este nivel. En este artículo hablaremos sobre todo de las ventajas de BIM para la gestión de proyectos en el nivel 3 de BIM, lo que implica, entre otras cosas, un enfoque de la gestión de datos y la colaboración que da prioridad a la base de datos.

Panorama de la información y BIM

Uno de los objetivos del BIM es formar una única fuente unificada de información para el diseño y el proceso de construcción del proyecto en cuestión, incluyendo información sobre activos, diseños arquitectónicos, información estructural y mucho más. Eso tampoco quiere decir que el BIM sólo sea capaz de trabajar con documentos relacionados con el CAD: también puede utilizarse en la programación, la animación, la detección de colisiones, etc.

Dado que no es necesario recurrir al desarticulado intercambio de diseños de la vieja escuela, es más fácil lograr un intercambio de información más directo, lo que es especialmente importante para la cooperación interdisciplinar.

No hay duplicados de archivos, ya que las plataformas BIM permiten a los especialistas trabajar en el proyecto al mismo tiempo, aplicando sus cambios a medida que aparecen. De este modo, no hay falta de comunicación sobre el estado del proyecto, es más fácil administrar todo el proceso y el riesgo de enfrentamientos es mucho menor que antes.

Este tipo de unificación de la información permite a los jefes de proyecto supervisar todo el proyecto con mucha más facilidad, con la ayuda de modelos 3D intuitivos que han sustituido a los complejos e inconexos documentos técnicos. Si el director del proyecto comprende mejor el proyecto, hay menos posibilidades de que se produzcan fallos de comunicación, ya que es más fácil ver las responsabilidades y los flujos de trabajo de cada participante del equipo.

Esto es lo que a menudo se denomina el «verdadero BIM»: un panorama de información fácil de utilizar, transparente y coherente, al que tienen acceso todos los participantes en el proyecto.

Flexibilidad y nuevas oportunidades con el BIM

La capacidad de disponer de información sobre el proyecto para todos los participantes en el mismo facilita también a los directores de proyecto la dirección y gestión de esos equipos. Todo el proceso se agiliza y es menos propenso a errores si los especialistas pueden desplegar sus conocimientos siempre que sea necesario, haciendo que todo el proyecto esté menos segregado y desarticulado.

De este modo, los equipos de diseño también pueden trabajar en tiempo real en los retos técnicos, haciéndoles conscientes de las capacidades estructurales del proyecto para que se puedan desarrollar soluciones más novedosas o adaptar las más antiguas a las limitaciones. El uso correcto del BIM permite a los distintos equipos comparar continuamente sus pensamientos creativos con la posibilidad técnica de cada uno de ellos, haciendo menos posible que se implemente algo poco realista.

Una fuente de información unificada permite a los directores de proyecto comprender mejor los procesos actuales, y lo mismo ocurre con los equipos de diseño y los de construcción. Este tipo de comprensión facilita el trabajo con materiales prefabricados, diseños experimentales, impresión 3D y otras tecnologías menos comunes.

BIM y gestión de proyectos: un mar de oportunidades

Con el BIM, es posible aprovechar la experiencia de todos los diferentes equipos y especialistas en beneficio del proyecto, incluso de aquellos que habrían estado desconectados de ese proceso en cualquier otro escenario. Como hemos mencionado antes, aunque el BIM es un programa, su «proceso» es igual de importante, si no más.

Es esencial que todos los participantes, y no sólo la dirección del proyecto, comprendan todas las ventajas que aporta el BIM. Es posible transformar por completo la forma en que sus equipos trabajan juntos, con una mayor eficacia y más creatividad como resultado.

Eso no quiere decir que la tecnología, en constante evolución, no esté también incluida. Por ejemplo, existe el escaneado láser que puede proporcionar información precisa sobre escenas y entornos en vivo, y esos datos pueden importarse al BIM para actuar como monitor remoto del progreso de la construcción.

Aunque el principal motor del BIM es la colaboración y la comunicación entre los distintos equipos, sería mucho más difícil alcanzar los resultados previstos sin un director de proyecto que comprenda todas las ventajas y posibilidades potenciales que el BIM puede ofrecer. Forma parte del trabajo del gestor de proyectos difundir información sobre los cambios que conlleva la implantación de la gestión de proyectos BIM y cómo puede utilizarse de diferentes maneras.

BIM y los gestores de proyectos: un potencial problemático

Uno de los principales objetivos del BIM es crear un activo de trabajo universal. Los gestores de proyectos son esenciales para alcanzar este objetivo, ya que utilizan procedimientos y normativas para establecer un entorno mutuo que beneficie a todas las partes implicadas.

Desde la perspectiva del diseñador, el objetivo de BIM es producir un modelo para su posterior elaboración, y el del consultor de costes es ofrecer estimaciones precisas. Por otro lado, los gestores de proyectos deben asegurarse de que el resultado creado reúna todas las cualidades para ser utilizado en el proceso de construcción.

El proceso de construcción en sí todavía no es perfecto: implica a muchas partes y entidades diferentes que se supone que deben trabajar juntas como un único activo funcional. La diferencia entre el BIM teórico y su parte práctica sigue existiendo, ya que algunas partes tendrían que dedicar inevitablemente más trabajo que las demás.

Sin embargo, esta brecha entre el BIM teórico y su aplicación práctica puede solucionarse con una gestión adecuada, que suele implicar objetivos claros, planes detallados y una cadena de suministro definida. Se supone que los directores de proyecto deben ayudar a diferenciar las ventajas reales del BIM de la información promocional estableciendo expectativas alcanzables desde el principio, lo que ayudaría a aumentar la productividad más adelante en el proceso.

Es posible señalar tres problemas significativos diferentes que los directores de proyecto suelen ver dentro del proceso de integración BIM: La adopción del enfoque BIM, el desarrollo de la visión BIM y las luchas de liderazgo.

• Adopción del enfoque BIM. Es esencial considerar detenidamente el tema de la adopción del BIM, ya que no hacerlo suele acarrear problemas innecesarios durante todo el proceso de la organización «más nueva», lo que a menudo provoca que la organización en cuestión abandone por completo el BIM.
• Desarrollo de la visión BIM. Una vez que haya decidido cómo va a enfocar la implantación de BIM, también es muy recomendable crear una visión adecuada de la implantación de BIM que incluya los objetivos de toda la empresa, los procesos que se transformarían con BIM, el calendario previsto de estos cambios, etc.
• Lucha por el liderazgo. Se necesita cierto equilibrio en lo que respecta al BIM y su implantación. Si la sugerencia de adoptar el BIM viniera simplemente de arriba, sería más difícil convencer al resto del equipo de todas las ventajas. Además, es posible que los trabajadores habituales que sugieran un cambio tan drástico ni siquiera se percaten de ello y, mucho menos, lo escuchen y lo pongan en práctica. Por eso, la sugerencia debe ser impulsada por alguien que pueda equilibrar el liderazgo del BIM y el de la organización para convencer a todos de por qué y cómo es importante.

Los directores de proyecto suelen dedicar mucho tiempo a educar a los clientes en el tema de la correcta organización del proyecto. Aunque la lista de beneficios potenciales del BIM es, de hecho, bastante enorme, un PM debería ser capaz de decidir qué beneficios serían los más útiles para esta empresa y este proyecto concretos. Las mejores prácticas para el BIM deben aconsejarse lo antes posible, y el seguimiento de los objetivos es esencial para comprender los beneficios del BIM.

Es justo decir que el uso de BIM complica algunas cosas más que antes, ya que ahora es necesario que todo el proyecto se rija por procesos, y también se requieren habilidades y conocimientos más específicos para que todo funcione correctamente. No hay una forma fácil de hacer estas cosas tan complejas, pero existen herramientas capaces de facilitar el proceso de forma significativa.

Los gestores de proyectos en BIM aún tienen margen de crecimiento. El sector de la construcción aún tiene que adoptar el BIM en toda su extensión y aún quedan muchas ventajas relacionadas con el BIM por descubrir. El BIM podría convertirse fácilmente en la vía para que los gestores de proyectos mejoren significativamente el ciclo de vida de los proyectos y abran posibilidades a nuevas innovaciones.

10 consejos para una mejor gestión de proyectos BIM

La implementación y el uso satisfactorios de todas las capacidades del BIM pueden producir muchos beneficios, pero también es un tema que no resulta fácil de abordar. Por ello, le presentamos 10 consejos que deberían ayudarle a comprender las ventajas básicas de BIM como programa y como proceso:

1. No olvide la experiencia del cliente. Implicar más al cliente en el proyecto le permite mantenerle informado y al día gracias a visualizaciones, resultados de análisis de datos y, en general, actualizaciones más frecuentes.
2. No se precipite en la implantación del BIM. Apresurarse en la implantación de BIM es una receta para el fracaso, y siempre es recomendable realizar una especie de proyecto de prueba si carece de experiencia en este campo.
3. Piense bien su plan de implantación. Un buen plan de implantación de BIM detalla cómo puede utilizar BIM cada miembro del equipo y cómo se comparte la información entre ellos. Debe crearse lo antes posible, ya que puede afectar tanto a su calendario como a sus costes totales.
4. Utilice plantillas BIM. Las plantillas BIM son una de las formas más sencillas de simplificar el inicio de su proyecto BIM, ya que las plantillas ya contienen una gran cantidad de información sobre el proyecto, como las capas del proyecto, una serie de familias/objetos BIM estándar, diseños de hojas, normas gráficas, etc.
5. Aproveche las herramientas de análisis. Estudie las alternativas antes de elegir la que utilizará para todo el proyecto. Incluso es posible utilizar herramientas de terceros o plugins para ampliar las posibilidades de las herramientas analíticas.
6. Piense en todo su proceso y en cómo puede ayudarle el BIM. BIM es mucho más que otro método de realizar todos los procesos antiguos y tendrá que replantearse la mayoría de las partes de su proceso habitual para aprovechar plenamente las capacidades de BIM.
7. Conozca las capacidades del programa. No es necesario tener un conocimiento exhaustivo de todo y de nada, pero la comprensión básica de las capacidades de su programa contribuye en gran medida a utilizar el BIM tanto como sea posible en su beneficio.
8. BIM – colaboración y cooperación. Los efectos de BIM aumentan en función del número de miembros que lo utilicen; es necesario que todos estén a bordo.
9. BIM requiere actualizaciones de los contratos o contratos totalmente nuevos. Los proyectos que utilizan BIM necesitan urgentemente nuevos contratos debido a la gran cantidad de puntos de referencia y entregables diferentes que ponen sobre la mesa.
10. Tanto los datos como el formato son importantes. Puesto que estamos hablando de BIM, tiene que conocer la información que su equipo debe entregar y el formato en el que se entregará.

Mejoras en la gestión de proyectos que aporta el BIM

Existen varias áreas diferentes en las que el BIM podría influir significativamente en el flujo de operaciones, aumentando así la productividad general, entre otros parámetros. Es posible segregar diez ventajas principales que BIM ofrece a la gestión de proyectos en concreto:

1. Mejores esfuerzos de comunicación y colaboración. Una referencia visual es esencial para mejorar la cooperación entre las distintas partes implicadas en el proyecto. Esto incluye también la posibilidad de que los distintos equipos compartan sus puntos de vista y trabajen juntos para mejorar el resultado final del proyecto.
2. Disminución de los costes de construcción. Mitigación de riesgos, menos errores y accidentes, reducción de los costes de los seguros, detección de zonas prefabricadas… son sólo algunas de las ventajas que ofrece el BIM y que redundan en la disminución global de los costes de construcción.
3. Visualización completa del proyecto. La capacidad de ofrecer a todas las partes implicadas una representación exacta del proyecto es una mina de oro de eficacia. Por ejemplo, los clientes tienen la posibilidad de averiguar posibles mejoras ya en la fase de diseño, etc.
4. Mayor productividad. Una mejor planificación y programación es uno de los métodos de BIM para influir en la productividad general del equipo de construcción: con menos pérdidas de tiempo, fases de construcción más definidas y averiguando de antemano posibles partes prefabricadas del edificio.
5. Mejor programación de tareas. Otra consecuencia de la visualización como ventaja es la capacidad de los distintos equipos para interactuar entre sí de forma más eficiente, lo que se traduce en una mejor organización general para todo tipo de trabajos dentro del proyecto.
6. Mayor detección de choques. La integración de diferentes planos de diferentes partes en el mismo sistema permite una mejora significativa en el departamento de detección de colisiones, de forma que los cambios en el proyecto puedan realizarse antes de que comience la parte de construcción en primer lugar.
7. Mejor calidad de construcción. Una conclusión obvia del aumento de la eficacia general, la mejora de la gestión del proyecto, es la mayor calidad de los productos finales (construcciones).
8. Modelado 4D y 5D. 4D – evaluación del progreso del proyecto, 5D – evaluación de costes.
9. Estimaciones más precisas. Determinar la cantidad correcta de materiales necesarios aumenta sustancialmente la precisión de las estimaciones generales del proyecto.
10. Mejor análisis de la información. La visualización de diferentes parámetros relacionados con el proyecto permite tomar decisiones mejores y más precisas. Algunos de los problemas más evidentes podrían incluso ser detectados automáticamente por el propio sistema.

Conclusión

Las capacidades de BIM son amplias y variadas, y eso incluye también el campo de la gestión de proyectos. Si comprende cómo funciona el BIM y el alcance de sus capacidades, podrá mejorar enormemente sus esfuerzos de gestión de proyectos BIM y llevar su proyecto a buen puerto con el menor número de problemas posible.